miércoles, 6 de noviembre de 2013

La eterna duda

Tras pasar ya unas cuantas jornadas, y con el recuerdo del partido del Racing aún en la retina, empiezan a surgir las eternas dudas y frases que siempre atacan al oviedismo.
Lo peor no son las dudas que se suscitan, sino que lo peor de todo son las cosas en las que parece que no se duda y que se da por supuesto y como verdad universal. Está institucionalizado que un equipo de 2ª B no puede jugar bien al fútbol... la frase de cabecera es "no se puede querer jugar como el Barça". Pues bien, con todos mis respetos para la opinión de la gente (aunque estoy más que seguro de que no tienen razón), el problema principal es que el Oviedo NO juega bien.
Se puede jugar bien al fútbol de muchas maneras distintas. Si lo haces bien, puedes defender replegado y salir a la contra, puedes jugar directo (la manera que menos me gusta por la estética), puedes ser combinativo en ataque pero con repliegue en defensa, puedes presionar salida de balón, etc... muchas variables, pero todas válidas desde la premisa de hacer bien las cosas. Y el Oviedo se queda en un par de puntos del repertorio de lo que busca, pero deshecha otros fundamentales.
Vayamos por partes:
- la salida de balón no es mala, hay una idea y no se desarrolla mal. Pero tocar todas esas veces atrás y adelantar los laterales una línea para dar una ventaja numérica y posicional, no sirve si no es para llegar con un balón claro a alguno de los jugadores que están en la zona de creación. Ojo, que puede ser mediante una conducción de un central que haya quedado liberado por la circulación de balón. Pero el problema está en que en este equipo no hay jugadores que busquen ventaja posicional para jugar, y muchas veces se acaba dando un balón a un jugador de espaldas o en franca desventaja, o lo que se pudo comprobar este último partido, a Cervero bajando a recibir a esta zona (más propio de un falso 9 que de un 9). El Oviedo termina convertido en un limpiaparabrisas, de lado a lado sin progresión de balón ni de jugadores.

- la amplitud está bien como concepto, de hecho es fundamental. Pero como todo... bien interpretada. Las superioridades por banda son usadas muy pocas veces, y en esas veces puede darse el caso de que suban hasta los dos laterales, como ya ha pasado unas cuantas ocasiones. Eso pasa en el Barça y sufre mucho cuando no finaliza jugada... en el Oviedo se sufre mucho más.

- el juego entre líneas. Zona considerada clave porque es un  espacio generado entre la defensa y el mediocampo rival. Cuando lo hay, el Oviedo acumula mucha gente en esa zona, con lo que el espacio acaba pareciendo el del camarote de los Hermanos Marx. Pues bien, peor incluso es cuando tenemos un rival que junta tanto esas líneas que se convierten en una sola...ahí nos quedamos sin recursos. En definitiva los jugadores NO SORPRENDEN.

- los balones al espacio. Jugamos con jugadores capaces de conducir 5-10 metros y sacar a la defensa de zona. Eso es mortal cuando tienes jugadores que buscan el espacio a la espalda de la defensa, tanto en diagonal de banda centro, como en ruptura por dentro. Pero eso con Cervero no sirve, porque es muy buen jugador, pero con otros recursos que no son esos.

- la presión. Esta manera de jugar necesita una organización en ataque que te permita tener varios jugadores cerca del centro de juego cuando pierdas balón, para así poder encimar al rival y que no juegue rápido. No es imperativo robar, es más importante no ser desbordado. En el Oviedo la presión es muy baja y se resume a pocos jugadores y en alguna ocasión. Replegamos para intentar dar ventaja a unos centrales que se supone que tienen que tener ventaja en los balones que vienen de frente, pero luego resulta que no se gana una disputa. Malo no, malísimo.

Podría seguir mucho tiempo para justificar el por qué no es verdad eso de que no se puede salir a jugar bien en 2ª B. Quita tensiones a la gente, corrige cosas de las que antes se citan, y vaya si vas a jugar bien. Y sin Xavi ni Ozil. Pero claro, así cobra más fuerza el tema de que hay que volver a buscar balones al melonar y a ver qué pasa (que insisto en que si se hace bien, es tan buena como otra solución cuando está bien trabajado).

Y sobre todo, si tienes una idea, muere con ella. Pero no empieces con las dudas, que eso se transmite a tus jugadores, y con ello a la afición y a los rivales. Resultado: equipo que no sabe a qué jugar.

martes, 23 de julio de 2013

Lo que significa un proyecto.

           Viendo los últimos tiempos del Real Oviedo, algo convulsos en el tema accionarial, pero yo creo que bastante bien encaminados en el tema deportivo, sólo pedía que de una vez por todas me mostraran un proyecto deportivo. Mi gozo en un pozo... (haciendo un juego de palabras, puede ser el pozo del tío Carmelo :D)

           Me explico... desde hace años no se vislumbra en el Oviedo un rumbo deportivo. Cada año se fichan 10 - 12 jugadores del gusto del entrenador de turno, en muchos casos se terminan cargando al entrenador, y después se trae otro de perfil completamente diferente, para el que ya no valen esos jugadores, y se echan 10-12 y se traen otros tantos... y así hasta infinito, se podría decir. Creo que desde que se cargaron a Rivas, uno de esos consejos que tuvimos ultimamente, no hay ningún tipo de rumbo.

lunes, 10 de junio de 2013

Con el corazón, más que con la cabeza

Bueno, pues después de un par de años de blog, voy a dedicar una entrada del mismo a mi gran pasión deportiva, que no es otra que el Real Oviedo. Nunca lo hice antes, porque como indico en el título, me cuesta ser objetivo con el equipo... y hay que reconocer que cuando uno no es obtivo con algo, no merece la pena ponerse a discutir por muchos argumentos que tengas, porque tu opinión está sesgada.

Si miramos como estábamos en Junio del año pasado y miramos como estamos ahora, es indudable que la situación es mucho más alentadora y favorable. Hay cierta estabilidad en el aspecto organizativo, y parece que se toman decisiones coherentes en la mayoría de los casos... luego podemos discutir si son las mejores o no, pero todas tienen detrás un por qué. Esto, viniendo de donde veníamos, es de verdad un paso de gigante. El futuro sólo puede ser a mejor, y más temprano que tarde, eso acabará dando frutos.

jueves, 11 de abril de 2013

Un mar de dudas.

           Decía ayer un muy buen amigo mío, cuando estábamos viendo el partido de vuelta de semifinales de Champions entre el Barça y el París Saint Germain, que el único partido de verdad bueno jugado por el Barça en las últimas fechas, era el que había jugado contra el Milán en el Nou Camp, porque no tenía dudas de que tenía que atacar y punto, y que en el resto de compromisos de altura se había enrollado demasiado en un mar de dudas contínuo.
           Analizándolo fríamente, es verdad, pues los únicos 10 minutos buenos del partido de ayer, fueron cuando se despejaron las dudas del qué hacer, y estaba claro que había que hacer un gol sí o sí. Resultado final... gol.

          Si nos remontamos al pasado reciente, hay que reconocer que el tema del central está mal gestionado desde hace unos cuantos años, con soluciones de urgencia que siempre salieron bien, pero es intentar hacer la cuadratura del círculo de forma permanente. Primero fué readaptar a Toure, después Busquets, después Mascherano y el definitivo había sido Abidal (para mí la mejor de todas estas que acabo de nombrar); hasta que se inventó el tema de Adriano este año. Lo de ayer de intentar recuperar a toda costa a un lateral "tocado", para ejercer de central, no es una decisión que se parezca a todo lo que se había vivido estos años en Can Barça, y deja a las claras una de esas muchas dudas...

         Otro asunto a estudiar es el por qué se sacan todos los córners al área y se renuncia a lo que tantos buenos resultados dio en estos últimos años. Si quieres sacar un córner efectivo, con un equipo como el Barça, tiene que ser cuando obligaste a salir 10 veces a buscar un saque en corto al equipo rival y le puedes sorprender. Si no estás dando pie de contínuo a una segunda jugada, que se está demostrando peligrosísima para el equipo. Otra duda.

         El no intento de juego del portero de un 90% de los balones que le llegan, es otro aspecto preocupante. Desde el mes de Enero en adelante se juegan muchos balones en largo cuando se da esta posibilidad. El por qué no lo sé, pero es otra manera de generar dudas en algo que tenías asumido como "normal".

         Cuando comenzó la temporada se vieron toques de Tito en el equipo. Algunos de ellos,  fueron un soplo de aire fresco, y eran una renovación de lo anterior con una buena propuesta. El principal estaba en la búsqueda de la profundidad por banda, con balones a la espalda de los laterales rivales, y las incorporaciones exitosas de los propios, buscando un dos contra uno, que no se veía desde el primer año de Guardiola, cuando Messi y Alves y Henry y el propio Abidal, lo hacían de lujo (estos últimos menos). Eso desapareció justo con su marcha a Nueva York.

        Y lo que más preocupa del caso, es que se está intentando sobremanera no perder la organización ofensiva, para poder tener una presión tras pérdida efectiva, y un buen acoso al primer pase, pero a costa en muchos casos de parecer un limpiaparabrisas de lado a lado, sin llegar a finalizar jugadas, y lo que es peor, causando pérdidas de balón que luego no son seguidas de esa primera presión. Otra duda...



       Es muy difiícil ponerse en la piel de un entrenador. Lo digo por experiencia. Desde afuera ves las cosas muy "fáciles". Y más debe serlo en la piel de uno interino, con un miedo terrible a tocar algo. Y ya no hablemos de uno que desgraciadamente está en una lucha contra una enfermedad terrible, y con un tratamiento que no debe dejar mucho lugar a otros aspectos, por lo agotador del mismo. El Barça está llevando este tema de forma encomiable...

      Esperemos que las dudas se transformen en seguridades, y que el Barça tire de oficio para sacar el último sprint del año adelante.